Santo Domingo — El misterio sin resolver de Sudiksha Konangi en Punta Cana
Han pasado casi seis meses desde la desaparición de Sudiksha Konangi, una joven estudiante india de 20 años que residía en Estados Unidos, y aún no se han esclarecido las circunstancias de su caso.
Konangi estudiaba medicina en la Universidad de Pittsburgh y se encontraba en Bávaro, en un resort de la zona, junto a un grupo de amigos el 3 de marzo de 2015. La Armada Dominicana, el sistema de emergencias 911 y la policía turística desplegaron operativos de búsqueda por aire, mar y tierra en las primeras horas posteriores al hecho. Incluso, el presidente Luis Abinader expresó públicamente su apoyo a la familia durante una conferencia de prensa y aseguró que los organismos del Estado trabajaban en coordinación con las autoridades extranjeras.
De acuerdo con la cronología oficial, Konangi fue vista por última vez el 6 de marzo en cámaras de seguridad junto a Joshua Reebi, quien fue interrogado por el Ministerio Público horas más tarde. Entre los hitos más importantes se destacan: el 10 de marzo, el FBI autorizó su ingreso oficial al caso; el 12 de marzo, Interpol emitió una alerta amarilla con la descripción física de la estudiante; y el 15 de marzo, se hallaron prendas de ropa en una cama de playa. Los padres de Sudiksha, Subbaraido y su esposa, enviaron comunicados a las autoridades de Estados Unidos y República Dominicana solicitando una declaración oficial sobre el destino de su hija. El 19 de marzo, Joshua Reebi abandonó República Dominicana y viajó a Estados Unidos, donde volvió a ser interrogado por la Oficina de Investigaciones de Seguridad Nacional (HSI) en Puerto Rico, debido a una irregularidad detectada en su pasaporte. Seis meses después, el archivo de Interpol sobre Sudiksha Konangi sigue activo, y aunque se han logrado algunos avances, no hay una conclusión definitiva. El misterio de Sudiksha Konangi permanece sin resolver.
Los primeros reportes
Durante esa misma semana, fue vista con Joshua Steven Reebi, un estudiante de Minnesota que se convirtió en pieza clave al declarar que había sido arrastrado por una fuerte corriente en la playa del Hotel Riu República.
Según su versión, en ese momento ya no logró ver a Konangi, lo que originó que se abriera una investigación formal.
Búsqueda inmediata
Poco después, el FBI se sumó al proceso, y cadenas internacionales como CNN, NBC, ABC y Telemundo dieron cobertura a la noticia, generando un interés mundial.
Avances y controversias
Su situación legal despertó críticas, ya que, aunque se le consideró testigo, sus familiares denunciaron que estuvo retenido varios días en condiciones inadecuadas, sin traductor ni asistencia legal completa.
Un juez en Higüey ordenó posteriormente su liberación, permitiéndole colaborar sin estar bajo prisión preventiva.
Sin embargo, ninguno de estos hallazgos resultó concluyente.
La familia y el dolor de la espera
Tras meses sin respuestas, manifestaron: “Con gran tristeza y profundo dolor aceptamos la posibilidad del ahogamiento de nuestra hija”.
El regreso de Reebi y nuevas interrogantes
Su padre, Francis Reebi, mostró su inconformidad con el trato recibido durante el proceso.
Un caso abierto
Las comunidades tanto en República Dominicana como en Estados Unidos mantienen viva su memoria, mientras las autoridades mantienen la investigación abierta.
La playa de Punta Cana donde fue vista por última vez continúa siendo un enigma para su familia y para los investigadores.